No es fácil ser breve con la historia de como nació, creció y sigue creciendo LanaAttack y es que todo esto ha sido una gran experiencia, con altos y bajos, pero me he ido sorprendiendo de como todo esto llamado LanaAttack, pareciera que tiene vida propia.

Se inicia sin ningún tipo de expectativa, solo quería hacer algo que me hiciera feliz y eso hice. A los 9 años conocí el tejido, una de mis primas me enseño a tejer a palillos y muchos años más tarde conocería el mundo del crochet gracias a los «Amigurumis» (técnica japonesa de muñecos tejidos a crochet)

En el año 2012, mientras estudiaba Post-Producción de video en el IP Arcos, tuve que crear un proyecto que «involucrara lo que me apasionaba hacer», justo en ese instante pensé en… el «Yarnbombing»… que es, un arte urbano en el cual se realizan instalaciones con tejidos en los espacios públicos (lo conocí ese mismo año viendo fotografías mayormente de Europa y Estados Unidos). Y así nace inicialmente LanaAttack, formamos con unas compañeras este grupo de tejedoras de intervenciones.

El grupo y la actividad tuvo excelente acogida, comenzaron a entrevistarnos en los canales, en los diarios, porque era algo novedoso y no visto aún en el país.
Por su parte, con mis compañeras nos graduamos, titulamos pero solo yo continúe con el grupo, registre la marca (tardaron dos años en otorgármela), comencé a hacer un electivo de tejido en el mismo instituto donde estudié y así continué con esto hasta ahora.

Actualmente, por estar en pandemia, no hemos podido realizar intervenciones, yo antes de esta situación, realizaba clases de tejido y he tenido que acomodarme al trabajo desde la casa.
Estoy ansiosa por comenzar a salir, llenar de color mi ciudad y seguir enseñando este maravilloso arte del tejido <3